A partir del próximo curso los colegios públicos de la provincia de Castellón podrán decidir si implantan o no la jornada escolar continua. Será el consejo escolar de cada centro quien decida si aplica o no la jornada intensiva que podría ser por ejemplo de nueve de la mañana a dos de la tarde. La cuestión es muy delicada, porque cada colectivo –e incluso cada particular– tendrá su propia postura al respecto.
Lo que hará la Conselleria es dar la cobertura legal para que cada centro pueda reorganizar los horarios con el consenso de la comunidad educativa. Hasta ahora, cuando las comunidades escolares habían propuesto modificar la jornada escolar en un centro concreto, no habían recibido la autorización por parte de la Conselleria de Educación, aunque otras autonomías las vienen aplicando con éxito desigual.
En todo caso, habría que analizar qué resulta más beneficioso para los menores. Hay estudios en un sentido y en otro. Es decir, hay quienes consideran que la jornada intensiva puede ser perjudicial para el rendimiento escolar y otros que al contrario dicen que en otras autonomías ya viene funcionando con éxito y que de esta forma los críos disponen de más tiempo libre para poder jugar, estar con la familia o desarrollar otro tipo de actividades.
Luego está la cuestión relativa a la diferenciación entre jornada lectiva y jornada escolar. Los profesores pueden tener su horario lectivo de nueve a dos de la tarde, pero ello no quiere decir que luego tengan que estar cerrados los centros escolares. De hecho, hay quienes consideran que la jorna escolar continua debería venir acompañada de una propuesta integral de actividades extraescolares, comedor y otros servicios complementarios para los menores.
Por ejemplo, hay autonomías en las que los docentes se turnan por la tarde para estar a cargo de los niños fuera del horario lectivo; en otros se organizan actividades complementarias y los menores están a cargo de cuidadores o de monitores. Claro que todo ello tiene un coste y en un momento en que tanto la administración como las familias disponen de pocos recursos económicos quizás sea difícil encontrar una propuesta que satisfaga a todas las partes.
No hay que obviar que a algunas familias les resultará difícil poder hacerse cargo de los menores a partir de las dos de la tarde debido a la imposibilidad de conciliar la jornada laboral con la escolar. Es cierto que algunos sectores han calificado de obsoleto el horario escolar de nueve a doce y de 15 a 17 horas.
Conciliar el horario laboral y familiar hoy en día resulta misión imposible. En otros países europeos, la jornada laboral termina a las seis de la tarde, cuando aquí no suele ser lo habitual y, en este sentido, cabría plantearse si también habría que repensar las jornadas laborales de los padres.
Hola buenas tardes, yo hace años que como madre opino que el actual horario escolar que tenemos no me parece correcto. Por todos los motivos que tu has dicho, los niños apenas tienen tiempo de jugar, porque la gran mayoría después de terminar las horas lectivas, sus padres los apuntan a actividades extra escolares. Que en fin, cuando terminan la jornada, entre estudiar cuando llegan a casa y ducharse ya o tienen tiempo para nada más. Y eso no esta bien. Otro engorro y muy importante a tener en cuenta es que las horas de las comidas, los niños que no se quedan al comedor, tienen que ir y venir. De la otra forma terminarían a las dos de la tarde y tranquilamente pueden comer, hacer sus tareas escolares y luego ir a jugar, ha hacer alguna actividad o simplemente, descansar. Y la gran cuestión, que hacer con los niños que sus padres no los pueden recoger. Pues continúan como hasta ahora. Si miras bien en los colegios, la mayoría de los chiquillos que se quedan en los comedores escolares, realizan actividades extra escolares, porque simplemente están demasiado tiempo en el patio jugando. La cuestión los niños que se tienen que quedar y que sus padres se gastan el dinero en el comedor y las actividades extra escolares, les da lo mismo que sea de 12 a 15 horas, que de 15 a 17 horas, el gasto y el resultado es el mismo. A diferencia de que los niños que si pueden ser recogidos por sus familiares, terminarían a las 14 horas y a descansar, como así se hace en la gran mayoría de España.